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“El auto-conocimiento es el fundamento de una vida vibrante”
Nuestra transformación no puede ser solo mental o estructural. Si queremos asumir nuestro potencial evolutivo plenamente y queremos cambiar, la reflexión, la contemplación y las prácticas físicas son muy importantes. Sin embargo, para lograr una transformación profunda, es necesario también tener impacto sobre nuestra fisiología, ya que ella se entreteje profundamente con nuestro mayor potencial energético.
La tradición Ayurvédica nos ofrece una comprensión profunda de los canales que residen en nuestro cuerpo y que iniciaron su despliegue en el vientre materno.
Cuando conocemos las tres organizaciones biológicas, es decir vāta, pitta y kapha, sabemos que se mueven de una zona del cuerpo a otra a través de canales, los cuales son físicos y energéticos a la vez. Estos canales se llaman Srotāmsi. Un srota es como un río que inicia pequeño y a lo largo fluye y se conecta con otras corrientes, hasta llegar al océano.
Los grandes srotās se conocen en Ayurveda como MahaSrotas, pasajes, tractos, senderos por donde se mueve la energía correspondiente a las diversas funciones del cuerpo: respiratoria, cardiovascular, auditiva, óptica, digestiva. Estos canales son responsables de transportar, comunicar y organizar funciones claves de nuestro cuerpo.
Los rishis observaron que el cuerpo humano estaba hecho de billones y billones de srotāmsi. Cada sistema y cada órgano, en particular, están constituidos así, y de su salud depende no solo nuestro cuerpo, sino el mapa emocional y mental que tenemos de la vida. Cada canal tiene un punto de partida, un pasaje y un punto de apertura final. En sus enseñanzas, el Dr. Vasant Lad menciona diecisiete canales.
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Sobre Rosemary Atri
Me apasiona explorar el movimiento como el camino mas directo hacia la expresión de libertad. La vida es movimiento. El cuerpo no es un instrumento a domesticar, es el territorio de nuestra existencia, y la clave está en valorar el repertorio expresivo al que tenemos acceso por el mero hecho de estar vivos.»
Es practicante y maestra de yoga, además de ser Terapeuta y Educadora Somática. Ofrece Mentoría Emocional Sistémica en sesiones individuales y grupales, así como mentoría en Vitalidad Somática de Movimento. Fue fundadora de Lunananda Yoga y Artes Somáticas, habiendo formado maestros de yoga durante mas de dos décadas.
Hoy en día dirige el Programa de Vitalidad Somática, donde integra perspectivas fundamentales de las grandes tradiciones de sabiduría, con descubrimientos científicos para integrar prácticas de conciencia somática, prácticas meditativas y contemplativas para atender la salud emocional y la sanación mental y espiritual del ser humano, fomentando un proceso evolutivo individual y colectivo.
Convencida de que el cuerpo es el territorio donde experimentamos la vida, y donde residen las experiencias dolorosas, de contracción y debilitamiento, da gran relevancia al uso del movimiento consciente para depurar y procesar la vida desde un lugar en que la vitalidad fluya como energía sanadora. Nuestra percepción acontece desde el vehículo de nuestro cuerpo.
Para adentrarse en esta comprensión estudió Medicina China, Sintergética y Terapia de Configuraciones Sistémicas.
Me interesa el camino de la sanación desde el cuerpo, y creo en el poder de la presencia plena y en la fuerza creativa de la mente cuando está encaminada inteligentemente.